La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) estableció nuevos topes para las extracciones en cajeros automáticos, transferencias y movimientos virtuales con el objetivo de reforzar el control sobre grandes operaciones de dinero y prevenir maniobras sospechosas.
A partir de este mes, el organismo definió montos máximos para operar sin que se genere automáticamente un reporte ante el sistema de monitoreo financiero. La medida busca “aumentar la transparencia y trazabilidad” en el flujo de fondos, tanto en el ámbito bancario como digital.
Cuánto se puede retirar sin que intervenga ARCA
Según la resolución oficial, los usuarios podrán extraer hasta $10.000.000 en efectivo de un cajero automático sin activar una revisión inmediata. En el caso de las transferencias o movimientos de billeteras virtuales, los límites varían según el tipo de titular:
Personas físicas: hasta $50.000.000.
Personas jurídicas: hasta $30.000.000.
Además, los plazos fijos tendrán un umbral máximo de $100.000.000 para individuos y $30.000.000 para empresas. En tanto, las compras al consumidor final no deberán superar los $10.000.000 para evitar controles automáticos.
Qué ocurre si se supera el tope
Cuando una operación excede los montos establecidos, las entidades financieras y plataformas digitales están obligadas a informar a ARCA. En esos casos, el organismo puede solicitar documentación que justifique el origen de los fondos —como recibos de sueldo, contratos, facturas o comprobantes de venta—.
Si la información presentada no resulta convincente o se detectan inconsistencias, el caso puede pasar a la Unidad de Información Financiera (UIF), responsable de investigar posibles maniobras de lavado de dinero o evasión fiscal.